Reseña Histórica

Fue creado como Centro Nacional de Lucha Antituberculosa.

Cómo se gestó el Centro Nacional de Lucha Antituberculosa

En la década entre los años 1950 y 1960, con la natural evolución experimentada en el campo de la investigación médica en el mundo, en Argentina se hace notar, en forma ostensible, la necesidad de cambios en la lucha contra el problema de la Tuberculosis.

El Dr. Horacio Rodríguez Castells, al frente de la Dirección de Lucha Antituberculosa, consigue concretar iniciativas importantes como la creación un Consejo Nacional de Tuberculosis.

Otros hombres, profesores universitarios, con la caída del Gobierno Constitucional de Juan Domingo Perón, regresan al país, de donde se habían visto obligados a emigrar. Vuelven con experiencias, reunidas en diferentes países del mundo y estudian la posibilidad de aplicar lo aprendido en su país. Intentan interesar a las autoridades provinciales y nacionales en la necesidad de la creación de un Centro de Demostración, sobre la base de un programa de Control de la Tuberculosis desarrollado en zonas urbanas y rurales. La idea tiene, enseguida, eco en todas las esferas.

Entre ellos se encuentra el Dr. Justo López Bonilla, quien regresa a su provincia natal, Santa Fe, después de haber actuado como asesor de la Organización Mundial de la Salud en Centro América, el Caribe y Asia.

Cómo se concretó

A 15 kilómetros de la ciudad de Santa Fe, en la localidad de Recreo, unida a la ruta 11, con acceso fácil por vía terrestre, fluvial y aérea, se levantan dos edificios que se construyeron para instalar en ellos un asilo de ancianos y que nunca cumplieron su finalidad, sirviendo en cambio, para alojar a los Convencionales Constituyentes de 1957 y a la delegación artística a un festival cinematográfico.

Las plantas físicas de los dos edificios son idénticas, ocupando un predio de 56 hectáreas. Los edificios son modernos, bien conservados, rodeados de un hermoso parque arbolado con especies autóctonas y foráneas de una belleza particular.

En el predio hay además nueve viviendas cómodas, agradables y amobladas completamente para residencia del director, administrador y profesores.Por su ubicación, arquitectura y amoblamiento, ambos edificios, ofrecen el máximo confort y funcionalidad.

Se piensa que este es un buen lugar para concretar esta realización y comienzan las gestiones.

En noviembre, en una reunión realizada en Rosario, con la asistencia de los principales tisiólogos del país, se decide la creación del Centro de Demostración de Lucha Antituberculosa en Recreo, Santa Fe.En 1959 se obtiene la conformidad del entonces ministro de Asistencia Social y Salud Pública de la Nación, Dr. Héctor V. Noblia, y del Dr. José F. Lo Bianco, Ministro de Salud Pública y Bienestar Social de la provincia de Santa Fe.

Esta decisión es ratificada por el Consejo Confederal de Control de la Tuberculosis, en una reunión efectuada en La Rioja, en mayo de 1960.

Un año duraron las gestiones hasta que se tomara la decisión de la ubicación del Centro en ese lugar.

Convenio de constitución

Se firma un convenio entre la Nación, la Provincia de Santa Fe, la Organización Mundial de la Salud y el Centro de Protección a la Infancia de las Naciones Unidas (UNICEF). La participación de los dos organismos internacionales se debe al conocimiento y la vinculación del Dr. López Bonilla con los mismos.

Por decisión del Gobierno Nacional y con el acuerdo del Gobierno de la provincia de Santa Fe, se crea el Centro Nacional de Lucha Antituberculosa con sede en Recreo (Santa Fe). El 2 de diciembre de 1961 se inaugura oficialmente el Centro Nacional de Lucha Antituberculosa, siendo su director el Dr. Justo López Bonilla.

Inicia sus actividades en enero de 1962, teniendo como objetivo básico dar impulso y normatizar el control de la Tuberculosis en la República Argentina.

Cuenta con un área de demostración que abarca cuatro departamentos de la provincia de Santa Fe: La Capital, Garay, San Justo y San Javier y posee una dotación de 150 profesionales, personal técnico, administrativo y de mantenimiento.

Responsabilidades

El gobierno de la Nación se hace cargo del sostenimiento completo del Centro y su instalación, efectuando las obras complementarias consideradas imprescindibles, para dotarlo de comodidades físicas adecuadas; también asume el mantenimiento del mismo y el pago de sueldos a todo el personal. Se hace cargo, de manera completa o contribuye, según el caso, al sostenimiento de becarios que siguen cursos en el Centro y responde por todos los gastos que no sean específicamente asignados a otro cualquiera de los organismos que participan en el programa.

Es responsable de la ejecución de los siguientes aspectos del programa que se llevan a cabo, íntegramente, con personal, equipo y material del Centro Nacional de Lucha Antituberculosa:

Planeamiento detallado.
Investigaciones epidemiológicas iniciales y periódicas.
Análisis estadísticos.
Supervisión de su ejecución.
Investigaciones bacteriológicas.
Internación de los enfermos que así lo requieran, estudio completo de los mismos y tratamiento mientras dure la internación.

El Centro Nacional se ubica en el edificio del lado norte y distribuye sus dependencias de la siguiente manera:

la dirección, los servicios técnicos, secretaría, biblioteca, salón de estudio y servicios administrativos,
la sección docente que comprende aulas, laboratorio para trabajos prácticos de epidemiología y estadística, dos salas de seminario y una secretaría con oficinas para reproducción y distribución de material docente,
el laboratorio de bacteriología de la tuberculosis, que ocupa un sector completo del edificio, dotado de los más modernos elementos para trabajo de rutina, investigación y enseñanza,
el laboratorio clínico para los análisis de orden general,
la sala de rayos X, dotada de un moderno aparato con tomógrafo y seríografo (salas de radioscopias existentes en el hospital);
un pabellón destinado a becarios. Cuenta con 20 habitaciones, todas con baño privado, placares y muebles diseñados teniendo en cuenta la comodidad y el buen gusto. En la entrada del pabellón de becarios hay un vestíbulo para recepción.
una agradable sala, dotada de aire acondicionado para que los becarios puedan descansar, leer y escuchar música. Hay también cafetería, cigarrería y un pequeño bar.

El gobierno de la Provincia de Santa Fe es responsable del establecimiento, ejecución y desarrollo progresivo del programa, cediendo para ello el Dispensario Central de Tuberculosis de la ciudad de Santa Fe y el Hospital Gumersindo Sayago, así como los locales necesarios en las Unidades Sanitarias y Centros de Salud del Área de Demostración que se tomen como lugares de trabajo. Provee el personal y equipo, facilita los materiales necesarios y se hace cargo del tratamiento de los enfermos que no estén internados en el Centro Nacional. La provincia de Santa Fe provee asistencia quirúrgica a los enfermos del Centro Nacional en la sala de cirugía torácica del Hospital Provincial de la ciudad de Santa Fe, contribuyendo el Centro al funcionamiento de dicha sala con un cirujano ayudante a tiempo completo.

El Hospital Gumersindo Sayago se ubica en el otro edificio del predio de Recreo, en el lado sur, al lado del Centro Nacional. Tiene capacidad para 300 pacientes de ambos sexos, con habitaciones de cuatro camas y servicios generales de primera calidad: comedor, teatro, cocina, lavandería, frigorífico.

Aporte de los organismos internacionales

Para la OMS, este Centro, constituirá uno de los tres organismos en el mundo formadores de personal técnico de la especialidad. Los organismos se hallan, uno en Praga, donde se imparte instrucción en idioma inglés, otro en Roma, en idioma francés, el tercero en Recreo, provincia de Santa Fe, donde se impartirá enseñanza en castellano. Esto coloca a Argentina en un punto de referencia dentro de la medicina mundial.

Dicha organización acordará becas al personal técnico y docente del Centro para su perfeccionamiento, en los establecimientos y centros de estudios de mayor relieve en el exterior.

Con el auspicio de la OPS/OMS se efectúa el Primer Curso de Tisiología Sanitaria en 1962. A este curso concurren 11 médicos de todo el país.

UNICEF aportará equipos de rayos X, equipos de laboratorio, vehículos y biblioteca.

El área de demostración

Garay y San Justo son prototípicos de la zonas agrícola-ganaderas del país. En San Javier, existe un elevado índice de población indígena, tribu Mocoví que permite manejar cifras estadísticas y datos de investigación en todos los niveles. En el lugar se dan índices de existencia de Tuberculosis que van de un 18/100.000 a un 35 por 100 mil habitantes.

La Capital, por la ubicación del Centro, su proximidad a la capital de la provincia de Santa Fe, con las características de una ciudad tipo de Argentina, centro densamente poblado con elevado standard de vida de sus habitantes, suburbio y barriadas del tipo “villas miseria”.

Objetivos iniciales del Centro

El objetivo fundamental fue la ejecución de un programa de control basado en la búsqueda activa de las personas con alta sospecha de tener Tuberculosis. Se utilizaría el control Abreu gráfico y se realizaría el tratamiento domiciliario de los enfermos.

Mostrar los resultados, considerado que en el futuro, el programa de control de la Tuberculosis del Centro Nacional sirva de modelo para el resto del país y su personal técnico deberá actuar como supervisor y asesor del perfeccionamiento de los profesionales y técnicos del campo de la tisiología en lucha antituberculosa.

Funciones iniciales

Se dividieron en dos grandes grupos: unas normativas y otras ejecutivas.

Las primeras incluyeron las siguientes: epidemiología, estadística, administración, educación sanitaria, asesoría, supervisión, docencia e investigación.

En la división ejecutiva estaban incluidas las actividades del programa preventivo-asistencial, realizadas por intermedio del Dispensario de Vías Respiratorias de la ciudad de Santa Fe, el Hospital Provincial Gumersindo Sayago y el Equipo Móvil del Centro Nacional.

Se da especial importancia a la transferencia de las acciones de diagnóstico, tratamiento y prevención de la enfermedad desde los servicios especializados a los servicios generales de atención.

Primeros funcionarios del Centro

El Dr. Romeo Cáceres ejerce la jefatura del Departamento de Educación Sanitaria, trabajan con él las instructoras Srtas. Elsa B. Devincenti y Cristina Toya. Su tarea consiste en tomar contacto con las autoridades de las asociaciones vecinales a fin de que el trabajo del Equipo Móvil se realice, aprovechando al máximo su capacidad. Explican en cada caso cuál es el móvil de la campaña, interesan a las personas representativas del medio en la realización de la misma y procuran despertar el sentido de la responsabilidad de quienes por su estrecho contacto con la población del lugar, están en mejores condiciones de orientarlas.

La Dra. Dalida Borda Bossana es Jefa del Laboratorio de Bacteriología.

La Srta. Olga Costantini tiene a su cargo la parte de Estadística, materia en la que profundizará conocimientos en Estados Unidos, mediante una beca concedida por la OMS.

La Srta. María Leonor Caila, Supervisora de Visitadoras del Dispensario Central y la Srta. Lilia Jiménez, Asistente Social.

El Directorio del Centro, seleccionó a un grupo de cuatro médicos jóvenes: la Dra. María P. de Giorgi, los Dres. Néstor Morelli, Antonio Pío y Alejandro Vasallo, a quienes se les dio instrucciones intensivas durante los meses de septiembre y octubre en: Epidemiología, Administración y Estadística. Al cabo de esos meses los médicos lograron un conocimiento básico de todos y cada uno de los aspectos del programa de control que se ha de desarrollar en el Área de Demostración, conociendo los distintos aspectos del trabajo. Luego, los cuatro médicos fueron contratados, permitiendo al Centro tener un personal polivalente en cuanto a conocimiento de las tareas y responsabilidades de un médico de Salud Pública que trabaja en Tuberculosis, evitando de este modo la súper especialización en temas determinados.

Al frente del Dispensario de la ciudad de Santa Fe, está el Dr. Alceo Fernando Gordillo, a cargo también el Equipo Móvil. El Dr. Gordillo estuvo en este cargo hasta su fallecimiento, en agosto de 1964. Fino espíritu y funcionario modelo, fue ejemplo de lealtad en la acción y de tesón en la tarea. Bajo su jefatura, el personal del Dispensario encontró inspiración y estímulo para que su trabajo llegara a un extraordinario nivel de eficiencia.

Posteriormente: la Dra. Giorgi se desempeña en el Dispensario de la ciudad de Santa Fe, poniendo en práctica los conocimientos teóricos adquiridos, valorizándolos con una práctica constante en el ejercicio de su profesión dentro de la especialidad. En el Centro Nacional cumple tareas de Administración Sanitaria, cuyas experiencias serán aplicadas en los cursos.

El Dr. Antonio Pío trabaja en el Dispensario y profundiza sus conocimientos de Epidemiología, colaborando con el director Dr. López Bonilla en el primer curso como el profesor de la materia.

El Dr. Alejandro Vasallo atiende la sala de hombres del Hospital Sayago y se especializa en Administración Sanitaria.

El Dr. Néstor Morelli atiende la sala de hombres del Hospital Sayago, igual que el Dr. Pío, se especializa en Epidemiología.

La Srta. Olga Costantini tiene a su cargo la jefatura de Estadística del Centro Nacional.

Cómo evoluciona el Centro Nacional

La Centro cambia de nombre en distintos momentos, reasignándose dependencia, estructura y objetivos nuevos.

1971, decreto Nº 92/71, pasa a llamarse Instituto Nacional de Epidemiología.
1973, por decreto Nº 3440, pasa a llamarse Instituto Nacional de Tuberculosis.
1982 el Instituto Nacional de Tuberculosis fue designado Centro Colaborador de la OPS/OMS en Epidemiología y Control de la Tuberculosis, constituyéndose en uno de los cinco que existen en el mundo. Continúa en la actualidad ya que fue redesignado en 2018.
1983, decreto Nº 2839, se aprueba una nueva estructura con la denominación de Instituto Nacional de Epidemiología.
1992, decreto Nº 1684, se aprueba una nueva estructura organizativa, se agrega a esa denominación el nombre de Dr. Emilio Coni.
1996, a partir del decreto 1628/96 se crea la Administración Nacional de Laboratorios e Instituto de Salud (ANLIS) y la institución adopta el nombre actual: Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias Dr. Emilio Coni.